Bio artista . Artist bio
Hay DJs, y luego hay DJ’s DJ’s.
Julien Veniel, cuyo nombre artístico es D’Julz, es sin duda uno de estos últimos: un verdadero artesano detrás de los platos cuya mayor habilidad es su capacidad para ir más allá de los meros géneros y tendencias, decidiendo en su lugar dar forma activa al siempre cambiante paisaje sonoro de la música electrónica a través de sus propias producciones, actuaciones como DJ y fiestas.
A lo largo de dos décadas y media de carrera, D’Julz lo ha hecho prácticamente todo. Empezó a pinchar en París, a menudo en las famosas raves de principios de los 90 y en clubes legendarios de su ciudad natal, antes de trasladarse a Nueva York en 1993 para perfeccionar sus habilidades y consolidar su reputación como un auténtico creador de gustos en su campo. El resto, como suele decirse, es historia.
A pesar de estar muy solicitado en todos los rincones del planeta, desde Estados Unidos a Japón, pasando por innumerables países, D’Julz siempre se ha mantenido fiel a sus raíces en París, donde dirige desde 1997 la ya legendaria noche “Bass Culture” en el club Rex.
Paralelamente al nacimiento de su fiesta, D’Julz ha dedicado gran parte de su tiempo y energía a la producción musical. En solitario, su música ha sido firmada por algunos de los mejores sellos underground del mundo: Circus Company, Robsoul, Ovum, Rekids, 20:20 Vision y muchos más. Desde que D’Julz empezó a producir, ha sido responsable de una larga lista de temas y remezclas que se han convertido en armas esenciales en las cajas de discos de la élite mundial de los DJ.
Como DJ destila clase y garbo. Un talentoso comisario de música cuyo pedigrí le ha granjeado fieles seguidores internacionales y un programa de giras constante que le lleva a recorrer cada semana las principales ciudades del mundo pinchando en las mejores salas del mundo. Por no hablar del famoso Circoloco (DC10), donde ha sido residente durante muchos años, ocupándose de la sala principal y de la mundialmente conocida sala de la terraza roja varias veces cada temporada de verano. Cada set demuestra la asombrosa habilidad de D’Julz para entrelazar su inclinación por los elementos dub con la esfera house y techno y sacudir DC10 con un potente groove y ritmos sensuales.
D’Julz sigue tan entusiasmado como cuando empezó a pinchar, ya que su sello Bass Culture va viento en popa, con más de 50 lanzamientos, y sigue recorriendo el mundo haciendo vibrar las pistas de baile cada fin de semana.
Una auténtica leyenda que seguirá en lo más alto de su carrera…
